Realidad de la Violación Sexual en Mujeres Migrantes en México

Por Sara Castañeda/// Ágora Digital

Zacatecas,(01-08-2023).-La migración es un tema complejo y sensible que afecta a millones de personas en todo el mundo. En el caso de las mujeres migrantes en México, se enfrentan a múltiples desafíos, entre ellos la violación sistemática de sus derechos sexuales. A lo largo de su travesía por el país, estas mujeres sufren abusos, explotación y discriminación que atentan contra su dignidad y libertad. Existe la urgencia de reconocer y abordar este problema para proteger los derechos humanos de las mujeres migrantes en México.

No es un tema nuevo, pero es una problemática que no se ha atendido en años. Un reporte realizado por INCIDE Social y Sin Fronteras en 2012 revela que mujeres migrantes en tránsito por el sur de México son vulneradas en sus derechos sexuales y reproductivos. Complementariamente un estudio realizado por Population Council, Inc. y El Colegio de la Frontera Norte en 2021 confirma esta situación en el territorio norte del país.

Ambas investigaciones destacan que esta situación se agrava debido a la desinformación sobre derechos sexuales y reproductivos, dificultades para gestionar artículos de higiene menstrual y para recibir atención médica y resolver sus problemas de salud sexual debido a su nacionalidad extranjera y su situación económica.

Redes de trata de personas, grupos criminales y las propias autoridades mexicanas aprovechan su situación para someterlas a abusos y coaccionarlas con fines sexuales. En este contexto, las mujeres migrantes son aconsejadas en prevenir embarazos tomando algún tipo de anticonceptivos antes o durante su tránsito por nuestro país.

Esta situación ha escalado a tal grado que existe un anticonceptivo que denominan Inyección Anti-México, la cual tiene un periodo efectivo de 3 meses. Sin embargo, las violaciones sexuales tienen consecuencias en las víctimas mucho más allá de embarazos, son vulnerables a contraer enfermedades de transmisión sexual, sufrir abuso físico, así como violencia psicológica, que pocas veces se realizan denuncias formales y el gobierno de México no presta las atenciones necesarias para prevenir y atender estos casos.

La lucha contra la violación sexual de mujeres migrantes no debe ser responsabilidad exclusiva de México. Es esencial que los países de origen y tránsito también colaboren en el intercambio de información y la implementación de políticas que protejan a estas mujeres durante toda su travesía migratoria. La solidaridad regional es un pilar fundamental para combatir esta grave violación de los derechos humanos. La violación a los derechos sexuales de mujeres migrantes en México es una realidad sombría y desafiante que no puede ser ignorada. Es hora de que la sociedad y las autoridades se unan en un esfuerzo conjunto para proteger los derechos humanos de estas mujeres vulnerables. Trabajar en conjunto para erradicar la explotación sexual, la violencia de género y la discriminación que enfrentan las mujeres migrantes en su búsqueda de una vida mejor. Solo a través de una acción decidida y compasiva podremos construir un México más justo y humano para todas las personas, independientemente de su origen o situación migratoria