El Zigzag siembra vocaciones científicas en las infancias desde hace 18 años

En el arenero del Zigzag las niñas y niños encuentran metales preciosos

Por Gerardo Romo/// Ágora Digital

Zacatecas,(21-01-2023) Erik y sus compañeros de primaria Salvador Varela del municipio de Villanueva, planean la ruta que Cubeto debe seguir en un tapete para estacionarlo en el lugar correcto… “¡está bien chido y divertido poder mover un robot!”, exclama el niño en asombro.

-¿Cuántos de ustedes quieren ser científicos?-, se les pregunta. Y las 16 niñas y niños en la sala de robótica del museo interactivo  Zig-Zag , levantan la mano al instante. Sus maestras, dos mujeres muy jóvenes sonríen ante la respuesta colectiva.

El museo Zigzag, donde la ciencia se aprende jugando celebra su 18 aniversario.

“Ni se imagina uno que aquí las niñas y niños que entren al museo serán los hombres y mujeres de ciencia en el futuro”, afirma el doctor  Sergio Huanaco Álvarez quien gracias a que un día siendo niño vio en la televisión la llegada del Hombre a la Luna el 20 de julio de 1969 se dedicó a la astronomía y se hizo experto en los planetas.

Huanaco es pieza clave para que en este 18 aniversario del Zigzag el museo reabriera remodelada  la sala de astronomía, donde   niñas, niños, docentes y estudiantes conocerán el origen del universo a partir del Big-bang.

Además podrán ver una colección de meteoritos, experimentarán caminatas espaciales y  en tercera dimensión podrán visitar el sol, conocer su conformación y tener frente a sí  planetas rocosos y gaseosos al alcance de la mano.

En el Zigzag, las niñas y niños se preguntan ¿cómo se hacen las burbujas? ¿de dónde nace el sonido? ¿Cómo nos podemos comunicar con un robot para que nos haga caso?

El secreto de este espacio es que las infancias aprenden jugando y salen de su experiencia con el conocimiento, sonriendo, felices, con deseos de seguir indagando y hasta con la certeza de que la química, la física y las matemáticas son más fáciles de lo que parecen.

¿Cuántos tipos de científicos hay?, pregunta Samanta, una niña de primer año de secundaria.

-Hay científicos que se dedican a estudiar la naturaleza, el cuerpo humano, o el comportamiento del hombre y la mujer en sociedad,(humanidades) puedes ser científica si estudias física, química, matemáticas… lo importante es que puedes llegar a ser como mujer lo que tú quieras ser- le responde Ana Sofía de la Rosa, una guía del Zigzag de 22 años y quien actualmente estudia ingeniería química.

Ana visitó por primera vez el museo siendo una niña como Samanta. “Cuando vine me impactó cómo me enseñaron aquí jugando y ahora, como guía, quiero poder darles a las niñas y niños que vienen una experiencia de alegría como yo la recibí”, dice Ana.

Las risas de las infancias suenan como una melodía que quisieras nunca terminara.

En el arenero la chiquillada encuentra oro, plata, muchos metales. “Yo quiero ser minero”, dice  un niño de la secundaria Rafael Ramírez de Guadalupe que se divierte en el Zigzag. Y de inmediato una niña, compañera del futuro gambusino reflexiona: “Desgraciadamente la minería contamina mucho y hay todavía mineros que mueren trabajando bajo tierra”.

Atenea Morales Samaniego, directora del museo Zigzag confía que este espacio especial para niñas y niños que merecen entornos de paz y desarrollo desde la felicidad perdure por muchos años.

“Es muy bonito ver cómo las niñas y niños, en especial cuando vienen de comunidades y municipios lejanos, entran con incertidumbre y hasta cierto temor por lo desconocido y salen después del recorrido con una sonrisa de oreja a oreja”.

Atenea recuerda a  Regina, una niña que llegó por primera vez a un campamento de verano y ahora ya como joven se convirtió en activista en favor del medio ambiente y da talleres en el Zigzag  para concientizar a la población en lo nocivo que es para el planeta el uso de bolsas de plástico.

O Sara Gallegos, una niña que tuvo un acercamiento significativo con la ciencia y la tecnología en el Zig-Zag, luego estudio física en la Universidad Autónoma de Zacatecas y hoy desde su canal de youtube Morra Científica, se dedica a explicar de manera sencilla temas de ciencia con la finalidad de que todos podamos entenderlos.

Ella está estudiando una maestría en Dinamarca y sus seguidores se refieren a ella como “una inspiración”.

El Zigzag  es un espacio que cambia vidas, una fuente de esperanza que construye horizonte.