Violencia, herida abierta en Zacatecas: Obispo

Por Ágora Digital/// Redacción  

Zacatecas.- La violencia en sus diversas formas como el homicidio o  los secuestros, roban la tranquilidad del pueblo en los municipios y comunidades de la entidad, consideró el obispo Sigifredo Noriega. 

“Veo un ambiente de inseguridad porque la herida está abierta. Es un reto para toda la sociedad, no solamente para las autoridades”, lamentó el obispo en conferencia de prensa.  

  Incluso, reconoció que muchos zacatecanos se ven obligados a dejar su tierra a causa de la violencia.

«Nada es igual para personas que abandonan la entidad porque fueron víctimas de la violencia”, expresó.

El éxodo de forzado de zacatecanos a causa de la violencia generada por grupos delictivos inició en el sexenio de Amalia García 2004- 2010 y continúa hasta la fecha.

Monseñor declaró  que en las recientes visitas pastorales a Tacoaleche, que pertenece al municipio de Guadalupe, se reunió con personas heridas a causa de la violencia, y ahora arrastran problemas emocionales, psicológicos y morales.

 Los municipios de Valparaíso, Fresnillo, Enrique Estrada, Ojocaliente, Calera, Pinos, Villa Hidalgo, Villa García y  Guadalupe es donde la iglesia católica detecta más situaciones de violencia  donde persiste la violencia.

“En todas partes hay situaciones de violencia que no se pueden ocultar y tenemos que atender, mínimo nuestra responsabilidad (como clero) es escuchar y ser personas que acompañamos, que la gente no se sienta abandonada”, expresó.

La violencia, reconoció Noriega Barceló  no sólo se concentra en las zonas urbanas y que ha pasado a golpear la tranquilidad de comunidades donde antes era ajeno esta circunstancia.

“Hay no solamente casos de violencia, sino que hay ambientes de violencia en ciertos polígonos donde se puede recrudecer en un tiempo determinado porque esta gente que la hace no se queda en el mismo lugar todo el tiempo”, consideró.

“Pareciera que es un sufrimiento sin fin, y una herida abierta permanentemente, es lo que está pasando», insistió.

Y explicó que la única manera de salir adelante es la convergencia de la sociedad civil organizada, las autoridades y las familias para recuperar el tejido social que la violencia y la indiferencia ha destruido.

Foto ( Archivo)