Descubre INAH tesoro de más de 500 mil piezas prehispánicas en ruta del Tren Maya

Por Gerardo Romo/// Ágora Digital Fotos cortesía INAH

Zacatecas,(08-09-2022).- Desde el inicio de la construcción del Tren Maya (mayo de 2020), obra insignia del Gobierno de México, hasta el día de hoy, se han encontrado más de medio millón de tiestas de cerámica prehispánica y 25 mil estructuras diversas con antigüedad de 4 milenios, hasta la época virreinal, informó Diego Prieto Hernández, director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en entrevista con Ágora Digital.

Entre las 25 mil  estructuras encontradas están desde pequeñas albarradas (muro de piedra construido sin argamasa), cercos para delimitar áreas habitacionales, plataformas, templos, edificios de distinta índole, canalizaciones de agua y depósitos de grano.

 También se logró el hallazgo de  400 bienes relativamente completos como vasijas, platos, tazones, elementos de ofrenda y un buen número de enterramientos humanos.

“Sabíamos que íbamos a encontrar muchísimos vestigios, pero no imaginamos la magnitud de los hallazgos”, dijo.

En estas labores de salvamento arqueológico participan 900 especialistas, de los cuales más de 500 son arqueólogos, hay antropólogos físicos, biólogas, topógrafos, ingenieros, arquitectas que coordinan las tareas de salvamento, además de 2,500 trabajadores no calificados que hacen  en las  excavaciones y recuperan material prehispánico.

“Esto representa el trabajo de salvamento arqueológico más importante del área Maya como no había ocurrido nunca en nuestro País”, celebró el antropólogo.

¿Debido a los hallazgos y la magnitud de ellos, abrirán nuevas zonas arqueológicas?, le pregunto.

-Los hallazgos son impresionantes, cotidianos y numerosos. Hay posibilidades de abrir otras zonas arqueológicas a la visita pública, por ejemplo el Presidente le plantearon el tema de Ichkabal en Quintana Roo, aunque requiere tiempo.

En el tramo 5 Sur del Tren Maya estamos encontrando un sitio muy interesante y extenso que podría tener potencial para habilitar la visita de públicos (como zona arqueológica).

Sinembargo; la prioridad es fortalecer el programa de mejoramiento de 21 zonas arqueológicas en el sureste y se van a incorporar dos nuevos museos, uno en Chichen Itzá y otro en Kabah para toda la ruta Puc que abarca a Uxmal, patrimonio mundial. Se está trabajando en recuperar algunos inmbuebles para resguardar parte de estos acervos que estamos recuperando- señaló.

Por la magnitud de lo encontrado, Diego Prieto Hernández estima que hay tanto material para especialistas que ni en 20 años se logrará terminar de estudiar todo el tesoro maya encontrado gracias al mega proyecto turístico y de desarrollo del Tren Maya.

«Vamos a tener  información que no terminará de estudiarse ni en 20 años, tenemos elementos para que en las próximas dos décadas se nutran decenas de tesis de licenciatura, maestría doctorado y una gran cantidad de tratados que nos ayuden a descifrar lo que nos dicen estos vestigios que datan desde hace 4 milenios hasta la llegada de las culturas de occidente y muchos vestigios también del periodo virreinal», explicó.

De lo más importante, explica es que con el trabajo arqueológico se han incorporado las comunidades para la preservación de la riqueza encontrada, lo que ha servido para desarrollar un trabajo comunitario, de identidad y consolidación del tejido social, muy importante para la región.

«El trabajo social, comunitario, alrededor del trabajo arqueológico ha sido fundamental, pues miles de familias se ha incorporado con nuestros especialistas en el cuidado del tesoro prehispánico encontrado y en la consolidación de la identidad de los pueblos alrededor del Tren Maya», señaló el también antropólogo.

Este trabajo con la comunidad, también, ha permitido reducir a la mínima expresión el saqueo del material encontrado.

«Los saqueos han sido aislados y cuando ocurren, de inmediato, la misma comunidad nos ayuda a detenerlos y para esto también ha sido muy importante la coordinación con la Guardia Nacional. Las comunidades ayudan a evitar que gente extraña entre y se lleve el tesoro que es de todas y todos».

Así avanza en el sureste de México el salvamento arqueológico más grande, como no había ocurrido nunca en el área Maya de nuestro País.

«El salvamento no es sólo recuperar materiales sino todo un proyecto de investigación y organización social sin precedentes», cierra el director del INAH.