Zacatecas ante nuestro sistema Federal.

Por Flavio Campos candidato del PAZ a la gubernatura

Zacatecas, (06-05-2021).-Los sistemas federales en el mundo se erigen como una estructura jurídico político para representar una diversidad histórica, étnica y de tradiciones amplia, que se encuentra distribuida espacialmente en territorios muy bien delimitados. Lo hacen de muy diversas formas: en algunos casos se aprovecha procesos de independencia o descolonización de un imperio para reunirse y cederle al poder central prerrogativas en cuanto a los servicios que debe prestar a las partes, impuestos para que las financie, pero en casi todos los casos se fija a nivel de sus Constituciones un objetivo de naturaleza social.

El Propósito último de la Unión de territorios con niveles de soberanía propios es la de garantizarle a los habitantes de las partes oportunidades equivalentes para su desarrollo humano, en otras directamente una equidad social.

En el sistema federal mexicano, no sucede así, esa posibilidad le queda asumirla, si acaso al titular del ejecutivo federal, en sus instrumentos de planeación. La dimensión social es de orden político y no un deber en sí del Estado.

En el Artículo 40 se define al Estado: “Es voluntad del pueblo mexicano constituirse en una República representativa, democrática, laica y federal, compuesta por Estados libres y soberanos en todo lo concerniente a su régimen interior, y por la Ciudad de México, unidos en una federación establecida según los principios de esta ley fundamental.”

En el Artículo 73 se deposita en el Congreso de la Unión las facultades para generar las leyes que regulen las competencias del gobierno central, las materias en las que los gobiernos deben concurrir o ejercer sus funciones bajo leyes generales, las materias para fijar ingresos mediante impuestos y derechos.

La historia reciente ha tenido un ejercicio muy marcado para dictar leyes generales, que van dando mayor fuerza a las instancias federales y pierden las que emanan de los regímenes interiores de los estados.

Por otra parte, se ha producido una subordinación política de los gobernadores durante el siglo XX coincidente con el régimen de partido casi único, muy parecida a la que se vivió en el período centralista y el del hombre fuerte: Porfirio Díaz.

El efecto más dramático de esa forma de federalismo es la enorme desigualdad social que padecemos de manera crónica y las desigualdades regionales. Por esa razón PAZ para desarrollar Zacatecas se adhiere a los movimientos político y social que se propone:

Construir una institucionalidad democrática y participativa que permita impulsar un desarrollo nacional integral con planeación para alcanzar derechos sociales igualitarios y universales y asegurar un territorio articulado y sustentable, conjunto de cambios que permitirán promover una inserción global con soberanía e independencia.

Pero este propósito es difícil alcanzarlo si seguimos con esa institucionalidad, dentro de la cual apuntamos el federalismo afuncional para los efectos de un México de iguales.

Proponemos un federalismo que solo concentre las funciones de defensa del territorio y mar patrimonial, el espacio aéreo. Que tenga los fondos solidarios para compensar a las regiones y estados de mayor marginalidad y que se haga cargo  de la representación       diplomática  nacional, que se establezca un sistema judicial con una corte suprema para resolver todas las controversias  constitucionales entre entidades y el gobierno central, entre entidades y de estas con sus municipios.

Requerimos un solo código penal de administración local y un régimen de amparo local.

Esto traería una modificación sustantiva de los recurso hacia las entidades y los municipios.

…Entre foros e invitaciones

Esta semana la actividad política proselitista estuvo llena de comparecencia de a foros, debates y comparecencias a medios de comunicación.
El primero de mayo asistí al foro agropecuario en la comunidad menonita de «La Honda» organizada por Render.
En este foro fue el espacio a donde expuse con mayor detalle la propuesta para alentar y modificar la actividad agropecuaria en la entidad.
Los dos grandes componentes padecen de una restricción muy importante al ser muy corta la cadena de agregación de valor, por lo que en la economía local no hay la suficiente derrama económica. El durazno por ejemplo se compra en bruto y lo industrializar fuera, el membrillo y chiles secos se venden a estados vecinos en los que se transforman en salsas, colorantes y moles industrializados.
Los procesos productivos son de poco contenido tecnológico y por tanto la rentabilidad es baja.
En resumen la capacidad de capitalización del Campo es muy débil y más porque el llamado capital social es ausente en nuestro campo. La organización, asociación o cooperación entre grupos grandes o pequeños para producir, adquirir insumos y vender productos está desterrada de nuestra cultura productiva.
Una tarea de la próxima administración pública estatal será fomentar la organización para recibir crédito, adquirir fertilizantes, semilla mejorada, asistencia técnica e implementos agrícolas, para producir con mayores rendimientos y para influir en el mercado de los productos que actualmente operan los intermediarios. La otra es ofrecer líneas de crédito para esos efectos.
Las dificultades que habrá de enfrentarse se refiere a la concentración de los recursos presupuestarios en el gobierno federal y el centralismo con el que definen las reglas como se deben asignar esos recursos.
El alto endeudamiento local y las crisis institucionales de los sistemas educativos y de salud. Por eso habremos de dar importantes luchas para descentralizado o federalizar las decisiones sobre los recursos nacionales.