No somos Ucrania

Por Gabriel Páramo

Mercurio

Ciudad de México.-(06-03-2022).-El periodista Jenaro Villamil lo expresó claramente. La actual guerra entre Rusia y Ucrania es una lucha de capitalismos. Los intereses geopolíticos del bloque ruso y del llamado “occidental”, con el componente clave de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), se refiere a mercados y zonas de influencia. Por supuesto, en esta lucha la gente de todos los días, los trabajadores, los pobres, son los que sufren la dureza de la guerra. Ocurre en Ucrania, pero pasa también en México y la guerra contra la delincuencia organizada.

Venus

Por supuesto, no todos somos Ucrania, por más que los medios de comunicación, información y entretenimiento, nos traten de convencer de ello. Ucrania es un país filofascista y militarista, que ataca minorías y persigue disidencias. No es el paraíso de la democracia ni mucho menos. Tampoco, podemos hacernos eco del llanto racista de muchos comunicadores que se duelen de ver güeros sufriendo y no gente del tercer mundo o de la periferia. Tampoco, podemos hacernos eco de naciones como Estados Unidos, acostumbrada a la extrema violencia directa o indirecta para resolver sus problemas geopolíticos, y que ahora quiere dársela de adalid de la cordura y la democracia.

Tierra

Chomsky, Eco, Cortázar y casi cualquier intelectual pensante ha denunciado, desde hace muchos años, el peligro de los vacíos de información y de la información sesgada en manos de los grupos de poder. Analizar el manejo informativo de la crisis en Ucrania y compararlo con la forma en que se han manejado las crisis de otras regiones, desde África a Latinoamérica, desde Siria o Afganistán hasta Palestina, puede servirnos para ilustrar esta forma facciosa e interesada de comunicar que se ha arraigado en este ya no tan nuevo siglo XXI.

Marte

Por otra parte, comparar a Putin con Hitler, además de inexacto representa una insensibilidad peligrosa. Putin es belicista, autoritario y poco democrático, nadie puede negar eso, pero no se compara con Hitler, ni su sueño de una Rusia grande y fuerte es similar al de la Alemania fascista, y más allá, lo que hicieron los nazis fue algo absolutamente criminal, incluyendo el holocausto de millones de judíos, gitanos y otros grupos. Rusia no está haciendo eso. Todas las personas que comparan a gente como Putin con Hitler lo que terminan por hacer es desdibujar la imagen del genocida austriaco convertido en alemán.

Cinturón de asteroides

Ojalá que la guerra en Ucrania acabe pronto, pero ojalá que también acaben todas las otras guerras que sanciona Occidente y aquellas de las que no se dice nada, y que la justicia y el entendimiento sean la norma en las relaciones de los países.