La transformación sigue avanzando

Por Santos Antonio González Huerta

Zacatecas, (31-07-31).-Esta semana en el Senado de la República se celebró un segundo periodo extraordinario de sesiones en el que se abordaron temas trascendentales para nuestro país, y donde se demostró que la construcción de consensos es la nueva forma de hacer política.

Se aprobaron asuntos importantes como la reforma a la Ley General de Salud en materia de prevención del suicidio, con el propósito de atender y garantizar el acompañamiento a quienes atraviesan por una situación de dificultad que pueda encaminarse a un trágico desenlace.

Asimismo, fueron aprobadas las reformas a las leyes secundarias para darles armonía con la reforma constitucional del artículo 19 en materia de delitos graves que han afectado al país como la corrupción, el feminicidio, el fraude electoral, el robo de combustible (huachicoleo), entre otros. Ya no más tolerancia a estos ilícitos ni pactos de impunidad con las autoridades.

Por otro lado, se lograron nombramientos fundamentales entre los que destacan diversos embajadores y, en específico, el del Director del Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral, necesario para cumplir con los acuerdos contenidos en el TMEC y la reforma laboral, procurando con ello los más amplios beneficios para la clase trabajadora, fuerza primordial para el progreso de México.

Por último, se aprobó una reforma a la Ley de Adquisiciones que permitirá que los institutos de salud, como el INSABI, puedan adquirir medicamentos en el exterior a precios competitivos y así cumplir con una de las demandas más importantes de la población, relativa al abastecimiento y disponibilidad de estos insumos en todo el país.

Sin duda, materializar estos instrumentos legislativos y demás decisiones requirió de entendimientos entre las y los legisladores que integran el Senado de la República; la labor del presidente de la Junta de Coordinación Política, Dr. Ricardo Monreal, fue responsable y prudente, buscando siempre los consensos que beneficien a todas y todos los mexicanos.

La profunda transformación de México y de la forma de hacer política no se detiene; los pilares del nuevo régimen continúan siendo consolidados y con ellos, se ratifica que el pueblo definitivamente es el titular del poder. Los pactos con la impunidad han terminado y caminamos ahora con esperanza hacia la justicia y el bienestar social que tanto anhelaba la sociedad mexicana.

El trabajo continúa; quedan pendientes aún varios temas como las leyes sobre extinción de fideicomisos, la creación de un Instituto de Estudios de la Hacienda Pública, entre otros más.

Habrá que estar atentos a los cambios y avances, siempre abiertos y dispuestos a participar en la construcción de las reformas que marcarán el nuevo rumbo del país. Y especialmente vigilando que desde el Congreso de la Unión se siga actuando con coherencia y compromiso para cumplirle a México.